Gobierno y obispos católicos evalúan propuestas de reforma política

El secretario general de la Presidencia de la República, ministro Miguel Rossetto, y el presidente de la Conferencia Nacional de Obispos de Brasil (CNBB), Raimundo Damasceno, se reunieron este jueves (5) en Brasília para discutir las propuestas de reforma política, cuyo eje central será el fin de la financiación privada en campañas políticas. O al menos así lo esperan el gobierno federal y los obispos brasileños, según Rossetto.

"Tenemos que repensar el sistema por el cual se financian las campañas y los partidos en este país. Necesitamos poner fin a la financiación corporativa, puesto que ella promueve una creciente exclusión de la participación democrática; cada vez más, solo quienes disponen de recursos participan en el proceso democrático”, dijo el ministro a la Agência Brasil.

La reunión sirvió asimismo para detallar los ejes que se consideran prioritarios en la reforma, como por ejemplo el voto con lista cerrada, modalidad considerada más democrática porque reduce la fuerza de candidatos populares, como artistas, futbolistas y otras celebridades, conocidos como "captadores de votos". Por el actual sistema, la cantidad total de votos de un partido o coalición se divide por el número de postulantes, lo que permite, por ejemplo, que una celebridad elegida por millones de votos facilite que otros candidatos del mismo partido o coalición sean también elegidos aunque hayan obtenido una cantidad muy pequeña de votos.

De acuerdo el ministro, el objetivo es que, inicialmente, el votante elija en que partido votará. Luego, elegirá su candidato a partir de la lista presentada por el partido.  Para Rossetto, acompañar las ideas y propuestas de los partidos permite una mayor supervisión por parte de la sociedad. "Esta ha sido la experiencia de las grandes democracias occidentales", afirmó.

El Gobierno y la CNBB también estudian nuevos estímulos a la participación de las mujeres en los partidos, y, consecuentemente, en la representación política del país. “Hay un conjunto de proyectos para estimular la democracia directa, por medio de plebiscitos, referendos y consultas populares previstas en la constitución brasileña”, agregó Rossetto.

“Todos esos temas nos permiten avanzar hacia una democracia representativa, directa y con más calidad, además de mejor cumplir las directrices de la constitución. Son cuestiones que conciernen a la sociedad brasileña, que desea ampliar los espacios de libertad y democracia para participar, cada vez más, en un gran proyecto de cambio para el país”, resaltó el ministro.

Traducción: Lucas Magdiel