La OCDE evalúa producción e inspección de frutas brasileñas

Por primera vez, una misión técnica de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) está en Brasil para fiscalizar el sistema brasileño de producción e inspección de frutas y hortalizas. La visita puede resultar en la entrada de Brasil en el grupo de frutas y hortalizas de la OCDE, responsable de crear normas para el reconocimiento internacional y, consecuentemente, la apertura de mercados a los productos de los países que integran este grupo.

Los auditores Jose Brambila-Macias, secretario del Grupo de Frutas y Hortalizas de la OCDE, y Ulrike Bickelmann, de la Oficina Federal para Agricultura y Alimentación de Alemania, inspeccionarán locales de recepción y empaquetado de uva y de mango. También está prevista una visita a Ceagesp, la central mayorista de la ciudad de São Paulo, para que conozcan la comercialización de frutas. Ellos se quedarán en Brasil hasta el viernes (14).

Miembro pleno

Según el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Abastecimiento, la expectativa es que la Organización apruebe, en su reunión anual de diciembre, la entrada de Brasil en el grupo de frutas a partir de 2018. Las negociaciones para esta visita arrancaron en 2015 y es importante porque se pueden abrir, a los productos brasileños, mercados que forman parte de la OCDE.

Brasil también quiere ser miembro pleno de la OCDE, que tiene sede en París y está formada por 35 países desarrollados. La solicitud de isión se formalizó en mayo de este año.

Exportaciones

De enero a mayo de 2017, Brasil exportó 282,2 toneladas de frutas, un aumento del 3,65% respecto a 2016, cuando se exportaron 272,3 toneladas, según datos divulgados por la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab). En valores, el país exportó US$ 299,1 millones, un aumento del 10,37% en comparación al mismo período de 2016.

El presidente de la Sociedad Brasileña de Fruticultura, Almy Junior Cordeiro de Carvalho, informó que Brasil es el tercer más grande productor de frutas en el mundo, superado por China e India. Sin embargo, la producción brasileña representa solo el 1% de las transacciones mundiales de fruta.

“Con una asociación internacional a un grupo fuerte como la OCDE, Brasil tendría mucho que ganar”, dice Carvalho. Según él, es necesario que el país avance principalmente en tres aspectos. El primero es el químico, para decidir qué agroquímicos usar y hacerlos compatibles con las normas internacionales. Además, hay que definir un patrón de conformidad, sobre todo para las frutas típicas del país. Por último, se deben tener cuidados biológicos claros, para no irrespetar normas internacionales y llevar a otros países organismos que viven aquí.

Traducción: Leonardo Vieira